El Cine a fin de cuentas pasen los años que pasen no deja de ser más que un "truco de magia" que dura bien el rato que nosotros queramos dedicarle o se mantiene en nuestra memoria como algo que nos sorprendió en su momento y que nos sigue sorprendiendo cada vez que lo disfrutamos.
No todo es blanco o negro cierto, también hay grises, sin embargo todo va en la persona, en su manera de ver las cosas y en su manera de interpretar (en este caso con las películas) lo que se le ofrece.
Uno puede ver una película de forma objetiva y analizar hasta el más mínimo detalle sacando una conclusión final de porqué es una buena película o no lo es, sin embargo todo esto pasa a ser subjetivo para todos aquellos que se conforman conque lo que vean les haga pasar un rato agradable y entretenido... De eso, a llegar al radicalismo absoluto tildando de obras maestras y films de Culto a todo producto que cae en gracia hay un trecho pues cada uno tiene los suyos y seguramente los estudiados y definidos como tal por los supuestos entendidos en la materia no son del agrado de todos/as...
Es por ello que es preferible muchas veces no ahondar en el verdadero valor del producto y simplemente dejarse llevar por los buenos o malos ratos que el mismo nos hace pasar.
NO A TODOS/AS NOS PUEDE GUSTAR LO MISMO y claro está que hay muy diferentes maneras de definir un producto porque al final es solo eso, un producto, hecho para el agrado de muchos y el desagrado de otros tantos pues es ahí donde reside la verdadera gracia, que se pueda discutir, charlar sobre el, tenerlo en boca y de manera amistosas crear coloquios entre amantes de este extinto arte. (
Dedicado a
Borgam Rey y a
Raúl Cifuentes)
Se acerca Halloween y es hora de analizar o volver a revisonar (como en esta ocasión) algunos productos ideados para esas fechas.... Atrás han quedado maravillas como
La noche de Halloween (John Carpenter, 1978) para que otros productos más menos comerciales, más menos curiosos se vayan abriendo paso en el mercado causando la admiración de algunos/as aférrimos al cine de género (terror en este caso), la repulsión de otros y la indiferencia de algunos/as como es mi caso, pues, metiéndonos ya en materia y en la película a tratar, Truco o Trato a fin de cuentas no es otro producto simple, predecible, que copia de grandes obras y que cae en continuos clichés cinematográficos, los cuales no hacen más que recordar al que la está viendo que el producto no es más que una simple adaptación de estereotipos a una determinada época....
Desde
Las tres Caras del Miedo (Mario Bava, Salvatore Billitteri, 1963), pasando por
Cuentos de Ultratumba (Kevin Connor, 1973) y
Creepshow (George A. Romero, 1982), hasta la actual
Cuentos de Halloween (2015) y haciendo parada en la que se está tratando, estos no dejan de ser productos hechos con más o menos gracia, más o menos acierto, los cuales tratan en un mismo film pequeñas historias de terror jugando con la baza de que algunas te gusten más que otras y al final la papeleta se resuelva con gracia pues uno/a siempre se queda con lo mejor de cada producto.
Esta
Truco o Trato juega en la misma línea sin embargo lejos de innovar o sorprender remarca y hace incidencia en los films clásicos anteriormente mencionados y ciñe su guión a arquetipos, estereotipos y clichés varios metiendo entre medias ramalazos de comedia negra (que los hay) limitándose a reflotar sentimientos por los clásicos y a copiar lejos de innovar, sorprender y adaptarse al "nuevo" terror.
Es una obra de bajo presupuesto escrita y dirigida por
Michael Dougherty el mismo que presentará Krampus - Maldita Navidad (2015).
En ella nos encontramos un padre-hijo psicópatas, una manada de mujeres lobo, unos discapacitados-perturbados mentales reconvertidos en muertos vivientes y espíritu de Halloween un tanto cabrón con cabeza de calabaza y cuerpo de niño que a mi particularmente me recuerda al NIÑO MELÓN interpretado por el polémico (actualmente) Guillermo Toledo.
La dirección es sencilla, el guión flojo y de el solo destaca una historia y la resolución (a modo fantástico, no podía ser de otra manera) de la trama, las interpretaciones son de manual pues el film es lo que es y está hecho para el consumo en una determinada fecha (cosa de la que también se aprovechan) y del apartado técnico solo destacan los efectos de sonido dado que en determinadas escenas todo llega a resultar técnicamente como muy cutre.
Intentar ahondar más en productos de esta índole es una pérdida absoluta de tiempo pues como bien he comentado siempre tendrán algún que otro séquito al igual que detractores.
No es que la cinta sea lo peor de lo peor, se puede ver si uno no se la toma como producto serio y la ve de manera superficial, pues no deja de ser un producto amateur que despierta el estado de gracia de algunos/as.
Vista y revisonada esta película no creo que la vuelva a ver otra vez en mi vida.
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Carátula Original del Dvd
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Es por ello que es preferible muchas veces no ahondar en el verdadero valor del producto y simplemente dejarse llevar por los buenos o malos ratos que el mismo nos hace pasar. NO A TODOS/AS NOS PUEDE GUSTAR LO MISMO y claro está que hay muy diferentes maneras de definir un producto porque al final es solo eso, un producto, hecho para el agrado de muchos y el desagrado de otros tantos pues es ahí donde reside la verdadera gracia, que se pueda discutir, charlar sobre el, tenerlo en boca y de manera amistosas crear coloquios entre amantes de este extinto arte. (Dedicado a Borgam Rey y a Raúl Cifuentes)
Se acerca Halloween y es hora de analizar o volver a revisonar (como en esta ocasión) algunos productos ideados para esas fechas.... Atrás han quedado maravillas como La noche de Halloween (John Carpenter, 1978) para que otros productos más menos comerciales, más menos curiosos se vayan abriendo paso en el mercado causando la admiración de algunos/as aférrimos al cine de género (terror en este caso), la repulsión de otros y la indiferencia de algunos/as como es mi caso, pues, metiéndonos ya en materia y en la película a tratar, Truco o Trato a fin de cuentas no es otro producto simple, predecible, que copia de grandes obras y que cae en continuos clichés cinematográficos, los cuales no hacen más que recordar al que la está viendo que el producto no es más que una simple adaptación de estereotipos a una determinada época....
Desde Las tres Caras del Miedo (Mario Bava, Salvatore Billitteri, 1963), pasando por Cuentos de Ultratumba (Kevin Connor, 1973) y Creepshow (George A. Romero, 1982), hasta la actual Cuentos de Halloween (2015) y haciendo parada en la que se está tratando, estos no dejan de ser productos hechos con más o menos gracia, más o menos acierto, los cuales tratan en un mismo film pequeñas historias de terror jugando con la baza de que algunas te gusten más que otras y al final la papeleta se resuelva con gracia pues uno/a siempre se queda con lo mejor de cada producto.
Es una obra de bajo presupuesto escrita y dirigida por Michael Dougherty el mismo que presentará Krampus - Maldita Navidad (2015).
La dirección es sencilla, el guión flojo y de el solo destaca una historia y la resolución (a modo fantástico, no podía ser de otra manera) de la trama, las interpretaciones son de manual pues el film es lo que es y está hecho para el consumo en una determinada fecha (cosa de la que también se aprovechan) y del apartado técnico solo destacan los efectos de sonido dado que en determinadas escenas todo llega a resultar técnicamente como muy cutre.
La película se luce visualmente, buena fotografía, buenos decorados, escenarios, buen vestuario, se deja ver facilmente y no se aprecian deficiencias técnicas.
Fernando es un tío muy majo, apasionado del Cine que no duda en ofrecer todo el material cinéfilo que está a su disposición para satisfacer las necesidades del consumidor, en este caso un coleccionista. Mientras un busca y rebusca Fernando se muestra muy acogedor y ayuda en la búsqueda del producto (sino sería una Misión Imposible) y se suceden continuas conversaciones sobre Cine, Bond, Western, Clásicos maravillosos en los que Fernando incluso recuerda las frases de algunas de las películas.
